sábado, 14 de noviembre de 2020

Nuevo libro de la Historia del Calzado

 

El nuevo libro de la Historia del Calzado acaba de ver la luz a través de la red de ventas Amazon.

Ver video: https://youtu.be/ZwU9oGm_5p4

La historia del calzado y del bolso están unidas por múltiples caminos que coinciden en determinados momentos por tratarse de los más importantes complementos de moda.

El paralelismo entre el calzado y el bolso es importante para que en nuestra web demos un resumen del nuevo libro que ve la luz.

Leer más https://museodelbolso.es/nuevo-libro-de-la-historia-del-calzado/

jueves, 27 de agosto de 2020

Origen y devaluación de las "playeras"

 

                Lo que conocemos con el nombre de "playeras" o "esclavas", según criterios, no es más que un tipo de calzado plano o con cuña que comenzó como un calzado de reyes y acabó como un calzado de "plebeyo".

                A través de la historia de la humanidad vemos los primeros indicios de aquellos calzados sujetos o enlazados a uno o varios dedos del pie, en civilizaciones remotas y hallazgos increíbles.

                               


                En el Museo Arqueológico Nacional se custodian unos calzados de fibra encontrados en  "La Cueva de los Murciélagos" en Albuñol,  de esparto trenzado ,datadas en el Neolítico Tardío, 3.500-2.700 a.C. y sujetas al dedo del pie.

                                Pero los americanos que presumen de tener lo mejor cito en sus museos, muestran en el Museo de Historia de la Universidad de Oregón, unas sandalias para sujetar al dedo del pie que, según afirman, datan de 10 000 a 13 000 años. Hechas de corteza de salvia y otras fibras y se encontraron en una cueva en Rock Fort, Oregón, EE.UU., sin embargo por el tipo de entrelazado de fibras y el estado general del calzado, es imposible su datación a esa fecha.

                Los Sumerios  4.000 a.C., considerada la primera civilización de la historia, nos muestran unas tallas en las que se representan "sanadores" y miembros de la realeza calzado unas sandalias sujetas al dedo del pie,


                También en un relieve del  palacio de Asurnasirpal II en la actual ciudad de Nimrud, en 850 a.C, en Asiria, nos muestra al soberano calzado un tipo de sandalia con cuña (muy similar a las antiguas civilizaciones Mesopotámicas), sujeto a los dedos del pie.

                                      




               Pero indudablemente la mayor fuente de información sobre el uso de la sandalia sujeta al dedo del pie, nos viene del antiguo Egipto, son muchos los enterramientos que han descubierto sandalias de ese tipo.

                                                      

Sandalias funerarias de oro. Tebas, Tumba de las Princesas. Dinastía XVIII. Metropolitan Museum of Art

                El protagonismo se lo lleva, sin duda, el tesoro funerario de la tumba de Tutankamon.

           


           

Sandalia con laminado de oro. Equipo funerario de Tutankamon. Museo del Cairo y Sandalias de la tumba de Tjuya y Yuya, padres de Tiye, madre de Akhenaton, fibras vegetales y papiro, Museo Metropolitan, Nueva York.



                Es evidente que la sandalia sujeta al dedo, nuestras actuales playeras, en aquellos años de esplendor  en las culturas ancestrales, estaban más en consonancia con el atuendo real. La "Casa del Faraón" tenía un encargado de portar las sandalias, a un alto dignatario que aparecía siempre en los actos procesionales con las sandalias en la mano.

            


                                    Detalle de la procesión funeraria en la tumba de Ramose 

                En una reproducción realizada por el célebre zapatero palentino Julio Vibot y conservada en el Museo del Calzado, se exhibe lo que debió ser una sandalia de dedo correspondiente a la última reina de Egipto Cleopatra VII, en los años 69 a 30 a,C..

                      


                Tras esas épocas de esplendor, parece que la sandalia "de dedo", como algunos le llaman, pasó a ser un calzado ligero en los pies de pastores y gentes del ámbito rural.

                Son varias las sandalias expuestas en diferentes museos del mundo sobre este tipo sencillo de calzado hechos con pieles de cordero, cabras o vacuno y que fueron calzadas y textualizadas en varias ocasiones en la Sagrada Biblia..

                         


                                                Sandalia hebrea siglos V a.C. a I d.C.

 

                                En la antigua Grecia se han encontrado esculturas con sandalias cogidas al dedo. También los soldados usaban un tipo de bota que se sujetaba al dedo del pie, cuando no iban descalzos, como en ocasiones ocurría en ciertas zonas del país.

                                                


Sandalia griega llamada Nínfides decorada en blanco.( Reproducción en el Museo del Calzado)

                                      


                 La crépida o Krépides en la escultura del pie de la diosa de la caza Diana de Versalles

                               Por supuesto que los Romanos en la antigüedad empleaban un tipo de sandalia llamado Solea que es lo más parecido a la playera actual.

                               

                                         Solea romano para las clases menos pudientes

En el Imperio Bizantino fue un calzado que lo usaban las clases más populares.

                        

                               


                                Sandalia visigoda del siglo V. (Museo del Calzado repr.)   

                A partir del siglo VI fueron casi siempre las clases más bajas las que calzaron el tipo de sandalia "de dedo".

                                 


    Calzado usado por los trabajadores del campo y las clase más bajas incluidos los mendigos. Muchas veces los confeccionaban con suela de madera y tejidos toscos atados con cuerdas. Siglo XII. Museo del Calzado (repr.)

                Durante los periodos de la larga Edad Media, el Renacimiento o las Edades Moderna y Contemporánea, no hay constancia de que la sandalia de dedo fuese un complemento que fuera usado por miembros de la Nobleza o por las clases Medias.

                Naturalmente cuando el calzado se convierte en un complemento de moda, los diseños se apartan de cualquier calzado que no suponga líneas que destaquen en la mujer,  la concordancia con el vestido.

                El calzado en algunos países asiáticos emplean la tira de dedo para sujetarlo, incluso en Japón hay un tipo especial de calcetín con el hendido para introducir en él el dedo del pie, especialmente en el calzado tipo Geta.   


             También en La India se utilizan un tipo de plataforma sujetas a una pieza de madera, metal o cuero, llamada sandalia Paduka o Khadau.  


             El calzado de moda del tipo sandalia gira casi siempre alrededor de diseños de gran belleza y colorido con cosidos o aparados complejos que, junto a la elevación de los tacones,  resaltan la figura y belleza de la mujer.

                La aparición de la "playeras", es una reminiscencia al pasado, pero no consigue establecerse como un calzado de calidad y estilo. Se vulgariza en todo tipo de materiales, incluido el plástico, y llega a todo tipo de personas como un calzado cómodo y circunstancial que nada o muy poco tiene  que ver con la calidad y mucho menos con la moda.


Elda deja escapar la feria del calzado online

 



Imagen de la feria del calzado de Caravaca de la Cruz.

Elda deja perder una nueva oportunidad con la que destacar y recuperar el prestigio zapatero de antaño. Eso cree el fundador del Museo del Calzado, José María Amat, quien propuso hace dos meses que Elda organizase la primera feria virtual internacional del calzado por la imposibilidad de hacer una presencial a causa de la pandemia de COVID-19. Ni los empresarios del sector ni ningún político ha mostrado interés en esta propuesta, que en cambio, ha secundado de forma pionera la localidad murciana de Caravaca de la Cruz. 

En su blog en este periódico digital, José María Amat propuso criterios y ventajas de esta iniciativa que no han parecido interesar a empresarios ni a políticos, pues ni se ha valorado esta opción. Por contra, esta idea la ha impulsado la ciudad murciana de Caravaca de la Cruz con su “Primera Feria Europea del Calzado”. Poco después, la Feria del Calzado Efica anunció que su edición sería virtual e internacional. "Estas son las primeras de muchas iniciativas virtuales y a Elda no parece interesarle esta buena iniciativa", señala Amat. 

“Propuse la idea porque la única forma de avanzar hoy en día es de forma virtual, la presencial no tendrá buena acogida por el miedo al contagio, lo  que hará que haya pocas ventas”, indica el exdirector del Museo del Calzado. “Me sorprende que el artículo tuviera repercusión fuera de la ciudad y no en Elda”, continúa.

Amat explica que “Elda ha perdido la fuerza mediática por lanzar la primera feria, pero creo que estamos a tiempo, todavía sería factible. El objetivo es ayudar a los nuevos empresarios, a los emprendedores, pues las empresas grandes ya tienen su nombre”.

Para este amante del calzado “es el Ayuntamiento el que ha de recoger la idea, pues no hay ninguna asociación empresarial que aglutine a los empresarios del calzado de Elda y Petrer. Tienen que contar no solo con las diez empresas punteras sino también con las otras 300, estamos a tiempo de enmendar este error, de apostar por el calzado eldense, pues impulsaría la ciudad y su economía”. Pese a este mensaje, José María Amat teme que sus propuestas caigan en saco roto porque “la inmovilidad para ayudar a las empresas viene de largo”, concluye. 

Otra oportunidad perdida

 

Los dos últimos trabajos publicados en este blog alertaban sobre la imposibilidad de realizar una Feria del Calzado presencial, no solo en España, sino en el resto del mundo. El 22 de abril con el titular "A modo de reflexión: ¿Cómo serán las Ferias del Calzado tras la pandemia?" ya se advertía de los problemas que conllevaría poder asistir a ferias presenciales de forma multitudinaria; más adelante con el título "Elda organiza la primera Feria Virtual Internacional de Calzado" publicado el 23 de mayo volvíamos a insistir en lo mismo, pero esta vez, aplicando criterios realistas y aportando una serie de posibles ventajas para que Elda fuese la primera en dar el golpe de efecto y crease una Feria Virtual de Calzado.

Ni esperábamos entonces, ni esperamos ahora, una reacción de los sectores zapateros de Elda para poner en marcha estas iniciativas, sencillamente porque han sido muchas las propuestas que se han lanzado desde estas páginas de Valle de Elda y absolutamente ninguna ha tenido el menor eco.

El sector zapatero de la industria del calzado comarcal está desaparecido y las propuestas caen en saco roto, no parece importar a nadie que Elda y comarca recupere su voz, ponga su reloj en hora y actúe como lo hacen otras comarcas zapateras dentro de nuestro país. Hemos sido testigos hace un par de días que en la vecina ciudad murciana de Caravaca de la Cruz, su Ayuntamiento y algunos industriales de calzado ponían en marcha lo que llamaron "La primera Feria Europea del Calzado", un titular que en sí ya es mucho. Hoy mismo la Feria del Calzado EFICA en Argentina, una de las mayores de Hispanoamérica, crea una Feria virtual Internacional de Calzado, y si las cosas no se aclaran, como desgraciadamente parece con respecto a la COVID-19, pronto leeremos como otras ciudades de Europa y América ponen en marcha lo único que cabe hacer, Ferias Virtuales para tratar de canalizar sus ofertas y lanzar sus colecciones. Pero eso aquí parece no entenderlo nadie.

Leíamos en titulares hace unos días la enorme preocupación que genera el cierre de algunas sucursales bancarias en determinados barrios, pero ¿acaso no es más importante que nos preocupemos por el cierre de nuestras fábricas? ¿Por qué no se dedican esfuerzos a esto mucho más que a lo otro, que será una consecuencia de lo primero?

No estamos haciendo bien las cosas, y lo digo con amargura y pesar porque esta industria es de todos los que trabajan en ella, los que viven en los pueblos zapateros y soportan situaciones difíciles sintiéndose impotentes ante tanta pasividad.

Es necesario y urgente reunir a los empresarios de calzado y afines, a todos, proponerles medidas que alienten la creación de estrategias que generen trabajo, empleo y riqueza y para ello hay que escuchar a todo el mundo. No es de recibo excusarse con frases como "ante el problema del calzado deben ser los fabricantes los que lo decidan" porque aplicando esa misma norma habría que decir ante la preocupación por el cierre de sucursales bancarias "los problemas financieros deben ser los bancos los que lo decidan", sin embargo se discrimina en función de proclamas electoralistas o de otro tipo. Seamos capaces de aglutinar iniciativas y aunar intereses ante lo que se avecina.

Al final, todo esto supone propuestas sin destino, que quedan en la mesa de la nada, pero siempre nos asiste la razón de los hechos denunciados y las hemerotecas que nos lo recuerdan.

"Elda organiza la primera Feria Virtual Internacional de Calzado" (Una propuesta en la imaginación)

 

Este es el titular que muchos desearíamos leer en los medios de comunicación. Así de sencillo.

Cuando las circunstancias adversas hacen peligrar los resortes económicos de nuestra principal industria. Cuando la continuidad de las Ferias del Calzado en el mundo están en momentos de incertidumbre. Cuando las expectativas de negocio sufren por la terrible pandemia que vivimos, es momento de nuevo de poner en juego la imaginación y apostar por dar un golpe de mano para buscar nuevas formas que mantengan la credibilidad del calzado español y sigan los avances en la necesaria relación del consumidor con la industria de fabricación de calzados y componentes.

No dudo que el virus que está afectando a todas las naciones del mundo y naturalmente a las economías respectivas, acabará tarde o temprano propiciando un nuevo clima de confianza. Pero hasta que no se disponga de una vacuna efectiva 100% me da la impresión de que nuestra situación de confinamiento voluntario para muchas actividades creará una barrera en muchas de ellas. Cuando los tiempos se normalicen nada será igual, al menos en lo que respecta a las relaciones comerciales en la industria del calzado.

Las presentaciones online se multiplicarán y las exposiciones presenciales se minimizarán, al menos a corto plazo.

No es descabellado que la ciudad que tuvo las ideas hace 60 años, sea de nuevo la que capitalice una nueva forma de relación comercial entre las firmas comerciales y pequeños comerciantes, con la industria del calzado de fabricación y en especial con nuestra industria zapatera nacional.

Propongo que sea de nuevo Elda la que lance una Feria Internacional con todos los medios de difusión a su alcance, para ofrecer los muestrarios de temporada desde un mismo portal, con indicación de las marcas (quienes las tengan) y las características esenciales de cada línea de diseño: tipo de piel, coloridos, componentes y disponibilidad para fabricar en tiempo récord las posibles ventas.

Se trataría de una Feria en la red, con los componentes necesarios como si de una Feria física se tratara: estands, pabellones, guía de expositores, catálogo, centro de compradores y cuantas otras actividades se puedan añadir a las expuestas.

Algunas ventajas:

Posibilidad de ofrecer nuestros productos de temporada mostrando los diseños y sus características, dirección web de la empresa expositora y todos aquellos matices que se deseen añadir, avalado por la seriedad y responsabilidad de quienes pueden dar confianza.

Poder mediático de la iniciativa en favor de nuestra ciudad, en primer término, pero también en beneficio del zapato español.

Mínimos costes de preparación (web, promoción en medios...) dando una buena oportunidad a los emprendedores para que muestren sus diseños con posibilidades de entrevistas y contactos.

Para Elda en particular una nueva muestra de su creatividad en ideas y un aporte a su prestigio como ciudad y como industria.

Quizás este escrito, en el blog Calzado, pueda armonizar los esfuerzos de nuestros poderes públicos, instituciones sectoriales y empresas. De tomarlas en consideración de forma inmediata crearía un efecto multiplicador muy importante y nos adelantaríamos a cualquier iniciativa similar en otras partes del mundo. ¡Nada perdemos!

A modo de reflexión: ¿Cómo serán las Ferias del Calzado tras la pandemia?

 

El Covid-19 marcará un antes y un después en la actividad económica de la industria del calzado en general.

Sin entrar en las estrategias que tendrá que poner en marcha el sector zapatero para recuperar el ritmo normal de trabajo, hay un factor muy importante que necesariamente tiene que cambiar, me refiero a las actuales Ferias del Calzado.

No imaginábamos el alcance de esta pandemia y la sorpresiva realidad que ha cambiado el panorama mundial en casi todas las facetas de la actividad cotidiana. Lo cierto es que estamos en una situación totalmente diferente que necesitará soluciones también novedosas y creativas. Si las Ferias del Calzado en España ya no funcionaban y se estaban reubicando sus emplazamientos, ahora lo dicho hasta aquí tampoco aporta una solución a corto plazo y requerirá nuevas estrategias.

A lo largo de los últimos años hemos venido demandando una especialización y descentralización en la forma de exponer las colecciones de zapatos. Sin esperar la que se nos venía encima, estábamos convencidos de que una descentralización de Ferias de Calzado que tuviese como nexo común reunir en un mismo espacio los tipos de colecciones que tuviesen características similares, era una fórmula creativa, pero esta nueva situación nos obligará a ser más precisos.

Las Ferias de Calzado multitudinarias darán paso a ferias más concretas dentro de una especialización, con menor cantidad de visitantes y solamente dirigidas a aquellos compradores que realmente estén interesados por este tipo de producto.

Pasará años hasta que podamos olvidar los momentos actuales, también tras estos confinamientos la presencia masiva de personas será un factor que requerirá tiempo y confianza de que todo ha pasado. Mientras esto ocurre, los zapatos deben seguir su camino y no puede haber producción sin ventas, y éstas no son posibles sin mostrar el contenido de las colecciones de cada temporada y contactos con clientes.

El posicionamiento definitivo de la digitalización en las presentaciones y en las ventas será otro de los factores a tener muy en cuenta. La unidad en el tratamiento de la información será otro factor decisivo. Si hasta ahora eran convenientes, a partir de estos momentos, será necesario para actuar con la flexibilidad que requiere el mercado y con la rapidez que necesita el industrial zapatero.

Confiar en nuestro sector de fabricación de calzados es vital en estos momentos, esta situación puede significar un revulsivo para entrar en una forma de actuar diferente de la que podamos salir reforzados.

La comarca del Medio Vinalopó, por la importancia de calidad industrial de los zapatos que fabrica y por su trayectoria histórica, debería tener un importante papel en el nuevo tiempo que se abrirá tras este colapso transitorio.   

miércoles, 26 de febrero de 2020

El Coronavirus (COVID-19) y nuestra industria de fabricación de calzados

Los estragos que está causando el coronavirus en el mundo están sembrando de dudas el futuro de las economías más estables.
No sabemos el tiempo ni el alcance de esta epidemia que podría llegar convertirse en pandemia. Pero a la vista de lo que está sucediendo hay que prepararse para los tiempos que vienen.
En lo que respecta a la industria del calzado y, naturalmente la que más nos importa que es la industria eldenses, el cierre masivo de fábricas de calzados y componentes en China y otros países asiáticos, está creando una nueva estrategia en los mercados mundiales ya que la crisis sanitaria ha interrumpido la cadena de suministro de muchas compañías.
El calzado fabricado en China (también los de más alta calidad) está provocando un desabastecimiento en cadenas de empresas importadoras y estas apuntan hacia las industrias de Europa (además de Marruecos) para poder abastecerse de ese tipo de calzado de alta gama. China no sólo es la segunda economía mundial y el mayor de los principales mercados para muchos sectores de lujo y esos sectores, incluido el calzado, no pueden quedarse descolgados.
Ante el descenso ya palpable de los ingresos y la imposibilidad de saber cuándo se controlará la situación, las grandes corporaciones están desvelando, con mayor o menor detalle, el impacto que prevén en las cuentas de 2020.
Los mercados en los que se mueve el calzado influye el aspecto commodity como premisa más importante, por lo cual, la influencia asiática es actualmente mayor.
Es una posibilidad que fabricantes americanos, principalmente, trasladen sus expectativas de compra a nuestro país, que junto con Portugal, se encuentran en las primeras líneas de posibles suministradores de calzado.
¿Qué podemos esperar de nuestra ciudad? Lo podemos esperar todo, pero para ello hay que mover muy bien las fichas y concentrar nuestra oferta porque, en esta ocasión como en casi todas, el pez grande se comerá al chico.
Esta semana pasada pude hablar con algunos agentes de marketings relacionados con las ventas en mercados internacionales y me confirmaron que sí Elda tuviese una oferta centrada y concretada en un determinado lugar, podría hacer llegar un claro mensaje de lo que hacemos. Con nuestras solas fuerzas es posible que no pudiésemos llegar a muchas compañías, pero a través de agentes especializados y con apoyo institucional se podría lograr.
Las empresas interesadas en acometer mercados exteriores necesitan de la colaboración y el apoyo económico que puedan prestar las instituciones, dado que salir fuera a buscar mercado es bastante costoso y que el fruto de esta actividad no suele ser inmediato.
Los Salones Princesa son el escenario donde se podría atraer la mirada de compradores con una muestra agrupada de bolsos y zapatos, serviría de atractivo a las posibles comercializadoras que quieren readaptar su mercado de fabricación.
Es urgente que Elda conozca su capacidad productiva en conjunto y que realice con la mayor urgencia una exposición de los productos y servicios con los que poder dar respuesta, ante una desgraciada situación extraordinaria como la actual.
Sin demora: Unas exposiciones de nuestros productos utilizando el marco de los Salones Princesa y un llamamiento con la colaboración y ayuda económica de las instituciones: Ayuntamiento, Generalitat y Gobierno Central, a través de los ejecutivos de marketing y comercializadoras de calzado internacionales para atraerles a nuestras ofertas y productos de calidad.  

domingo, 23 de febrero de 2020

La Cultura del Calzado floreció en medio del derrumbe ferial


Si Elda brilló de forma impensable en la década de los años 60 y 70, por su creciente y pujante industria, los años 80 fueron funestos. Las luchas fratricidas entre industriales del calzado y afines perdió su cohesión y quedaron divididos ante los intentos de desestabilizar FICIA.
Los intereses de unos y otros pusieron el punto de mira en la ciudad, que dio la gloria y el empuje al sector zapatero a través de sus Ferias y, a partir de ahí, todo empezaría a cambiar para mal recorriendo el camino que permitiría que Elda dejase de ser la sede de las ferias del calzado.

Ante la proximidad de su inexorable final, como Ciudad Ferial, Elda todavía dio muestras de su empuje para asentar la Cultura Zapatera, ofreciendo impulsos positivos en el campo de la cultura y las bellas artes.
A mediados de 1981,  se inició el camino para  transformar la FICIA  en una Fundación, pero en mayo de 1981, y asumiendo el alcalde de Elda la presidencia del Patronato de FICIA , se reabrían nuevas heridas y la FICIA caminaría a mayor velocidad hacia su más alto grado de politización.
El 14 de diciembre de 1981 se constituyó oficialmente la Fundación FICIA y en octubre de 1984 se crearon los premios de Investigación dotado con 400.000 pesetas; y el de periodismo con 200.000 pesetas. Un año después se amplió al concurso de fotografía, dotado con 50 mil y 25 mil pesetas.
 En enero de 1989 sería nombrado presidente de la Fundación FICIA Javier Sancho, que desde hacía años era vicepresidente, siempre en la sombra, pacificando los intensos conflictos que surgían cada día. Sancho, potenció los concursos para prestigiar esa llamada Cultura del Calzado y lanzó otro de pintura sobre temas zapateros. Pero FICIA estaba herida de muerte a dos años de abandonar nuestra ciudad.

A pesar de la degradante situación de las ferias, ante las luchas abiertas entre unos y otros por acaparar el protagonismo ferial y a sabiendas de que Elda lo pedía todo, Javier Sancho siguió empujando la cultura desde la Fundación FICIA, e incluso con aportaciones personales para mantener alguno de aquellos concursos que pasaron a llamarse "Premios Presidente de la Fundación FICIA". Su honorífico nombramiento como Hijo Adoptivo fue una justa compensación a lo mucho que hizo por la ciudad.
El legado de Javier Sancho a través de la Fundación que presidía, fue lo más brillante que se produjo en aquellos terribles años de descomposición de nuestras manifestaciones feriales.

domingo, 9 de febrero de 2020

Elda debe ser sede de la Feria del Calzado para mujer de media y alta gama


Así de sencillo y así de claro.
Después de años dando tumbos por nuestra geografía para tratar de hacer rentables las Ferias del Calzado en España, caen en la cuenta del fracaso al que se ha llegado y buscan en la provincia de Alicante que sea IFA la que organice las próximas Ferias del Sector Zapatero, concretamente lo que hasta ahora se hacía en IFEMA, primero, y en La Nave, después.
Hay que felicitarse porque, aunque tarde, se haya reconocido que las sedes de la Feria debe estar donde se encuentran los cimientos de la industria, donde se fabrican la mayor parte de los zapatos de España y naturalmente los de moda especialmente.
Dicho lo anterior y dado que se apela a los alcaldes de las ciudades zapateras, a los empresarios y sus asociaciones, vamos a exigir con mayor fuerza se atienda a nuestro pueblo.
Elda fue la sede que inició las Ferias del Calzado en España.
Con la sede de FICIA en Elda, se produjeron las mejores y más fructíferas ideas para agrandar la base industrial de fabricación del calzado en este país, y desde Elda se inició el milagro económico que dio trabajo y riqueza a las ciudades zapateras.
Desde Elda venimos denunciando la situación decrépita de las Ferias del Calzado en España, mientras en otros países prosperan y reciben cientos de peticiones de fabricantes, muchos de ellos españoles.
Es un hecho constatado que las Ferias se nos arrebataron de nuestra ciudad por intereses muy discutibles, se nos dijo que había que propiciar escaparates donde los visitantes y compradores pudieran llegar con mayor facilidad e intensidad.
Elda no ha olvidado y no olvidará sus momentos de esplendor, pero nada es irreversible para siempre y ahora se vuelven a dar las circunstancias para que una parte de aquello pueda regresar a la ciudad de la que nunca debió salir.
IFA, que ofreció también desde Elda todos sus certámenes, puede y debe ser la que organice las nuevas Ferias del Sector. Pero ahora IFA ya no está en Elda, se encuentra en Torrellano que es una partida del término municipal de Elche.
Es el momento de luchar por nuestra ciudad. Es el momento de reivindicar más que nunca nuestras señas de identidad.
Proponemos que las próximas Ferias del Calzado organizadas por IFA tengan dos sedes en recintos feriales diferentes, una, quizás la más grande, en los pabellones de Torrellano, para el calzado en general.  Pero en Elda debe realizarse una sección dedicada a los zapatos de mujer de media y alta gama. Con esta propuesta nadie legítimamente podría oponerse porque Elda mantiene la hegemonía de ese tipo de calzado y a Elda se le debe una compensación nunca otorgada por la pérdida de sus ferias.
Los Salones Princesa podrían ser esa subsede de IFA y en ellos se podrían concentrar los stands de calzado para mujer de alta gama y las marcas más emblemáticas de ese calzado.
Andrés Molina es un hombre joven que ha demostrado su pragmatismo y profesionalidad al frente de muchas arriesgadas propuestas. En este caso él podría ser el anfitrión de unas Ferias de Calzado que revertirían nuestro futuro.
Elda se lo ha merecido y debe reaccionar ante este nuevo experimento que ofrece el Consell.

jueves, 6 de febrero de 2020

El Museo del Calzado ante su 21 cumpleaños

El día 4 de febrero de 1999 se inauguró el Museo del Calzado en el edificio que hoy conocemos.
Desde aquellas fechas han ocurrido muchas cosas, pero quizás lo más importante es que la consolidación de la muestra expositiva se ha convertido en algo consustancial con la ciudad. Elda ya no se concibe sin este museo que rinde tributo a la industria del calzado en general, y que marca la diferencia entre la fabricación de calzados en España y la que se realizaba en la ciudad de Elda.
A través de sus salas podemos apreciar la enorme transformación, tanto en calidad como en diseño, comparativamente con cualquier otra ciudad zapatera del país, pero esto hoy ya ha cambiado; la calidad, el diseño y el prestigio de la industria y sus componentes, han evolucionado a mejor en todos los rincones zapateros de España.
El mensaje que se lanza desde este museo es nítido y perfectamente audible:
 "El Calzado fabricado en España tiene una historia en la que el hilo conductor es la calidad".
 Esto no ha cambiado. Desde el Museo del Calzado los conceptos de diseño, calidad y prestigio del zapato español, son un reclamo que se actualiza de forma permanente. Otra cosa es que los propios empresarios, a los que más beneficia este escaparate, lo perciban como propio o por el contrario se sientan ajenos a ello. Esta percepción entra en contradicción con la que experimenta el visitante, que ve en la muestra permanente, el empuje y la fortaleza de la industria del calzado nacional.
En el seno del Patronato del Museo se sientan todas las instituciones sectoriales que tienen que ver con el zapato: La Federación Nacional de Fabricantes de Calzado (FICE)La Asociación Valenciana de Industrias del Calzado (AVECAL)La Asociación Española de Componentes de Calzado (AEC)La Fundación FICIA e Inescop, sin embargo la viabilidad económica del museo sigue en peligro. Ninguna de estas eminentes asociaciones e instituciones aportan más que buenos consejos, mientras el Museo del Calzado hace cada día milagros para poder respirar con los fondos aportados por los únicos que lo mantienen: El Ayuntamiento de Elda y la Diputación Provincial, en menor medida.
Cuando se plantea este fenómeno anti natura, muchos interlocutores no dan crédito a este desinterés. Algunos se preguntan el porqué de un museo que actúan únicamente y casi en exclusiva para ayudar al prestigio de los zapatos españoles en su conjunto, no sea sustentado económicamente por ese mismo sector al que se supone se entrega.
En el último año he podido visitar algunos museos internacionales en ciudades de países europeos de nuestro entorno, y todos sin excepción, reciben ayudas de forma directa o indirecta de las asociaciones sectoriales de la industria que representa, incluso en una de ellas me llamó la atención la instalación de un complejo sistema de presentación de tendencias, de las firmas que exhiben sus zapatos en el museo del calzado y que, a través de las asociaciones que las representaban, habían costeado a su cargo un moderno sistema informatizado para que sus afiliados pudieran ser visitados desde aquel museo a través de internet.
Sería comprensible que unas instituciones desvinculadas y desinformadas de lo que ocurre en el Patronato de la Fundación del Museo, pudieran no comprometerse económicamente con el mismo, pero en nuestro museo, todas, absolutamente todas, las que tienen que ver con el mundo del calzado en nuestro país, están también representadas en el museo, con voz y con voto.
Un aniversario para una reflexión: No es justo dejar en la precariedad a lo que se supone es una de las primeras armas de promoción.  

sábado, 25 de enero de 2020

Elda 2020. Este será tu año


                   
                             Monumento a la Familia Zapatera (imagen Josep Sumalla Jordana)
Se nos fue un año más y es momento de reflexión y buenos deseos. El cambio de rumbo de la ciudad es algo inaplazable y urgente.
Elda recuperará con fuerza su poder y su prestigio a poco que unamos nuestras fuerzas y canalicemos nuestras ideas.
En las últimas semana del año se han promovido una serie de reuniones de tipo empresarial que, sin objetivos claros ni dotación, podrían suponer un mensaje de buenas intenciones, que debería abrirse a nuevos interlocutores, posibilitando la búsqueda de objetivos concretos. Los argumentos de siempre nos situarán en el mismo lugar en el que estamos. Debemos ser más ambiciosos en los planteamientos con fórmulas creativas e innovadoras.
Como eldense deseo hacer llegar a mis paisanos y especialmente a nuestro Ayuntamiento en Pleno, alguna de las posibles soluciones que vengo planteando todos estos años, con una súplica especial: que sean tratados sin personalismos y simplemente como ideas que nacen de ciudadanos de Elda que desean mantener el progreso para la ciudad. Por lo tanto lo que aquí se plantea no es solamente el idílico proyecto de un soñador, se trata de un plan elaborado y contrastado con algunos de los empresarios y trabajadores que conocen nuestra industria y han sabido identificar las causas y los efectos de la regresiva situación como población  industrial.
Apelo a los jóvenes empresarios, a los emprendedores, a los Sindicatos Obreros, a los trabajadores, a los vecinos de los diferentes barrios de la ciudad, a los colectivos culturales. a todos aquellos que aman a nuestra industria del calzado y a los que nos visitan por esta misma causa. El tiempo puede llegar a crear una visión difusa de la trayectoria de Elda como capitalidad  de la industria del calzado y como ciudad pujante en materia de innovación y creatividad alrededor de su principal industria de fabricación de calzado, los jóvenes deben conocer cuáles fueron los momentos de mayor gloria de Elda y como se produjeron los hechos hasta llegar a la situación actual.
También es obligación del gobernante exprimir al máximo las ideas y rechazarlas o aceptarlas con fundamentos, nunca por ideologías o protagonismos, máxime cuando está en juego el nivel y calidad de vida de muchas personas.
 Todo lo que aquí se dice no es nuevo, ya se ha reiterado en distintas ocasiones,  pero no por ello deja de encerrar un mensaje de esperanza.
El calzado es nuestra industria soporte y en ella debemos apostar fuertemente porque la tan deseada diversificación industrial no es cuestión que, con nuestras solas fuerzas, podamos conseguir a medio plazo.
¿Dónde nos encontramos?
Es un tiempo delicado para nuestra industria de fabricación de calzados pero, como en otras ocasiones, este momento es uno más de los vividos en otras épocas, del que podemos salir airosos y con fuerzas renovadas. Lo preocupante es que los indicadores en, pérdida de tradicionales mercados, falta de crecimiento en producción y empleo en nuestra ciudad, difieren sensiblemente de lo que está ocurriendo en otras poblaciones zapateras del país, y esto no depende más que de nosotros mismos, del poder de convocatoria y de la percepción que, los otros, especialmente los canales de comercialización del calzado en general, tienen sobre la cualificación y valía de nuestros productos fabricados.  
Alguna de las empresas más emblemáticas han perdido parte de su imagen y al abocar su plena producción a comercializadoras con sus propias marcas, alguna de ellas de excelente trayectoria y prestigio, crean una dependencia vital. Cuando esas comerciales deciden desplazar sus producciones, deslocalizando su actividad, desencadenan un impacto económico muy negativo, no sólo en todos los integrantes de la cadena de producción y suministro, sino en el entorno socio laboral de la zona, desorientación a los empresarios y trabajadores que se habían entregado a ellas. El objetivo es muy claro, hay que desandar el camino, es decir, volver a la relocalización, volviendo a la marca y a la propia identidad. Cuando una o varias empresas comerciales deciden abandonar nuestro territorio no hay marcha atrás, en la mayoría de casos no hay segundas oportunidades y cuando se toma la decisión es para no volver más. En nuestro caso  debe seguirse una estrategia en la que no solo sea una cuestión de ahorro de costes sino también en la búsqueda de la calidad y la seguridad.  Y transmitir la imagen de que fabricar en Elda y su comarca es una decisión que comporta beneficios en todos los órdenes y supone en sí mismo una solvente marca de origen.  
Desandar caminos erráticos
A poco que salgamos de nuestro entorno cercano veremos que en España  hay ejemplos muy significativos de empresas que abandonaron sus propias marcas y su mejor imagen para entregarlas a otros con ubicaciones fuera de nuestro territorio nacional e incluso más alejados en países asiáticos, sin embargo tras el furor que supuso la "moda" de marcharse a buscar otras prestigiosas marcas que fabricaban en países con costes más bajos, han regresado estableciendo de nuevo sus estrategias comerciales desde nuestro país, desde las zonas industriales de mayor prestigio para lo que fabricaban, es el caso de industrias del juguete, de la confección, incluso de procesos de fabricación muy específicos como es la fabricación de guitarras, por nombrar algunos ejemplos y que podremos encontrar en cualquier hemeroteca . 
Elda debe y puede recuperar su imagen más emblemática, más digna y prestigiosa. Para ello muchos estamos aportando soluciones de inmediata aplicación con el fin de intentar transformar esta realidad en una oportunidad y conseguir resultados lo más rápido posibles, ya que el tiempo apremia y la ciudad ya no puede perder un sólo minuto en reafirmarse en sus señas de identidad más notables.
Proponemos un Plan de Ciudad, un proyecto de imagen con una serie de medidas que nos conduzcan por la buena senda, para vender zapatos, crear empleo y riqueza. Desde Elda y comarca apoyándonos en nuestra historia industrial, en el buen hacer de los profesionales de la industria. Necesitamos convencer de nuestras cualidades y con esas bases restablecidas, lo demás vendrá por añadidura. Contamos con el magisterio y dedicación de nuestros especialistas y profesionales, pero no encontramos motivación alguna para poder incrementar el comercio desde la situación en la que estamos hoy.  Si perdemos el soporte que sustenta la imagen de ciudad como sede de la industria zapatera de calidad para zapato de alta gama, Elda estará abocada a la irrelevancia dentro del conjunto de ciudades zapateras de nuestro entorno.
Mejorar nuestra imagen como zapateros de calidad
Con propuestas ya conocidas:
1.- Que Elda vuelva a convertirse en centro de diseño y moda de zapatos de mujer de alta gama, con exposiciones de tendencias desde nuestro territorio y donde los emprendedores dispongan de un escaparate para cada temporada.
 ¿Qué lograríamos convirtiendo a Elda en Centro de Presentación de Tendencias?
Nuestra ciudad se transformaría en lugar y ciudad de referencia para asentar cada temporada las bases de los diseños que conformarían las diferentes colecciones de los diseñadores y emprendedores presentes en cada muestra. La ciudad realizaría un efecto llamada ante los fabricantes de este tipo de calzado en la Comunidad, por supuesto, pero también en España. En esa presentación, como ya se hizo en otras ocasiones no muy lejanas, se desvelarían también los avances en nuevos materiales y todo eso se podría realizar con escasos costes y con la colaboración del Museo del Calzado y de los Salones Princesa para dar realce a la muestra y cabida a los diferentes stands.  Elda ofrecería la moda y la calidad con sus propios recursos.
2.- Involucrar a la Universidad y a las empresas de mayor calado de la comarca para que firmen un convenio de colaboración alrededor de la "Cátedra de Calzado del Medio Vinalopó".
¿Qué quiere decir esto?
En momentos como los actuales en los que la deuda comunitaria y estatal es muy alta y hay pocas posibilidades de obtener subvenciones para promocionar nuestro calzado, un convenio por medio de una Cátedra, entre la Universidad de Alicante y las Empresas más sobresalientes del sector en el Medio Vinalopó, tanto de fabricación de calzados como auxiliares, creerían un fondo económico a partes iguales que sería tutelado por un consejo rector y serviría para realizar campañas de promoción de nuestro calzado femenino de calidad.  También para realizar encuentros o simposios sobre tendencias, mercados o nuevos materiales, entre otras actuaciones. Ya la Universidad de Alicante, hace solo unos años, declaró y se comprometió a poner en la mesa una cantidad económica si los empresarios comprometían cantidades similares. Esta Cátedra es necesaria y su fundamento da legitimidad a nuestro zapato de calidad. 
3.- Potenciemos la marca "Zapatos hechos en Elda""Zapatos de Elda" o cualquier otra que nos defina como origen de ese zapato de calidad.
¿Para qué sirve y como se llega a conseguir esta marca?
Aprovechando el paréntesis navideños he recabado de nuevo información de la Oficina Europea de Marcas y la cosa es tan sencilla como la presentación de una instancia y memoria (incluso brindo mi colaboración para perfilar todo ese trabajo, ya que el grueso del mismo lo he elaborado desde hace varios años), para obtener la marca "Zapatos de Elda" - "Elda city shoes".
La marca señala con claridad el origen de los zapatos y aquellas empresas locales que deseen aplicarla deben cumplir con unos objetivos muy claros, tanto en calidad de materiales, procesos de fabricación nacionales y empleo de mano de obra legal. Obsérvese la importancia de estos conceptos e imagínense la brutal respuesta que podría darse desde Elda al prestigio, a la calidad y de forma especial también al clandestinaje. La marca podría las bases para el futuro cuando se apruebe la Denominación de Origen para productos no agroalimentarios y nuestro pueblo esté posicionado en primera línea de petición. Y todo esto en manos de una entidad como el Museo del Calzado  que arbitraría los medios necesarios para llevar a buen puerto esta marca y su aplicación. Teniendo en cuenta que en su Patronato están implicadas todas las asociaciones y organismos e instituciones que tienen que ver con el sector zapatero, no existe otra institución con mayor poder de convocatoria ni más comprometida con la actividad industrial de la ciudad.
Si todo lo anterior es importantísimo, lo más necesario para el Museo del Calzado es que a través de la organización que se pudiese montar, se autofinanciaría en todo o en parte y ya no precisaría medios económicos ajenos para subsistir. La simple vigilancia y aplicación de las normas para aplicar la marca Zapatos de Elda, conllevaría unas tasas que ayudarían a su autofinanciación proveniente de las industrias que decidan aplicarla e incorporarla a sus zapatos, todo esto con un protocolo de transparencia y promoción que sería una ayuda muy importante para las empresas que lo decidiesen implantar en sus zapatos.  
La marca Zapatos de Elda es mucho más importante de lo que algunos pueden imaginar. La ciudad ha creado esta marca a través de generaciones de fabricantes de calzado que han dejado una estela de calidad y de prestigio, especialmente en el zapato de mujer de lata gama, ¿porqué no admitirla como propia?. Esa marca conlleva una garantía que hoy es inalcanzable a corto o medio plazo por ninguna otra ciudad zapatera porque para prestigiar ese tipo de marca hay que emplear una larga vida a ello, como Elda lo ha hecho en el trascurso de los años.
La Oficina de Marcas de Alicante espera nuestra inscripción ya desde hace cinco años..
Asentar el liderazgo de Elda como ciudad zapatera
Para ello debemos tomar buena nota de lo mucho que se aprende viajando por ciudades zapateras de Europa y América. Crear un buen ambiente social de donde vivimos y lo que hacemos es necesario que el calzado sea el hilo conductor de casi toda nuestra actividad profesional e incluso lúdica. La ciudad de Elda debe convertirse en un reclamo total del zapato de calidad de alta gama, implicando a todas sus actividades, a su planeamiento y proyecto de ciudad, incluso abordar aspectos relacionados con el comercio y el urbanismo. Una ciudad que aplica singularidades alrededor de su más importante y casi única industria es esparcir a los cuatro vientos el producto de su trabajo.
El zapato en el mundo es un complemento, quizás el único complemento, que entusiasma a casi todos. Detrás del calzado femenino hay una gran cantidad de personas que lo siguen por: fabricación, historia, comercio. Crear un novedoso reclamo nos haría únicos en Europa. Sumando a lo ya experimentado como "La Mujer Mejor Calzada de España"; poniendo de nuevo en actividad el "Concurso Luís García Berlanga sobre zapato femenino" y todas las actuaciones que aquí se exponen, convertirían a Elda en algo especial y muy difícil de igualar.
1.- Renombrar una Avenida con bulevar para asignarle el nombre de la "Bulevar de las Mejores Calzadas" ¿qué mejor motivo de llamada para un pueblo que ostenta esa singularidad y es único en lo que hace?. Quizás nadie se sienta ofendido si a esa moderna Avenida de Ronda o Camilo José Cela, se le renombra a su bulevar se colocan placas de hormigón con los nombre de las Mejores Calzadas, eso sería una atracción en sí misma y un motivo de alusión constante a nuestra ciudad y su industria, al mismo tiempo que se cumple con un deseo expresado de dedicar a mujeres los nuevos nombres de calles de Elda. ¿No quieren asignar calles con nombres de mujeres notables?. En eso hay un motivo más. El bulevar de la Mejores Calzadas se llenarían de placas de hormigón con el nombre de cada Mejor Calzada y el año de su designación, incluso un mosaico explicando los méritos del personaje, ya son veinte con la última nombrada ¿se figuran una avenida con decenas de placas y nombres de famosas que nos recuerdan que en Elda se hacen zapatos de alta gama calzado por mujeres excepcionales? ¿no creen que merecería una especial atención turística para observar esas inscripciones, comprar zapatos y degustar su tradicional cocina?. Esto es un logro que nadie nos ha regalado y nació un día como se alumbran las buenas ideas, con constancia y trabajo, por ello debemos explotarlo con la mayor intensidad para fortalecer nuestras señas y nuestro calzado. Las agencias o incluso el propio municipio podría fletar autobuses a los hoteles de las zonas costeras para atraer a ese otro turismo al que se le podría ofrecer algo más singular y tangible, con visitas a museos etc.   
2.- Crear una calle llamada "Calle del Zapato", esa calle es necesaria en nuestra población al igual que existe una Plaza del Zapatero,  pero no sólo eso, en esa calle se podrían instalar tiendas de zapatos que repoblaría esas céntricas calles con locales cerrados desde hace años. Me estoy refiriendo a Dahellos o José María Pemán, entre otras. Esa calle Pemán cuyo nombre se piensa sustituir, ¿porqué no llamarla calle EL ZAPATO?. Incluso se cambiaría el tipo de iluminación actual, por otro concebido expresamente que podría consistir en altas pantallas de policarbonato iluminados interiormente por lámparas leds de bajo consumo y en forma de tacón de aguja (es una novedosa idea ya explotada en algún otro país). Esa calle que se inicia en la Plaza del Zapatero formaría un buen conjunto icónico de la ciudad. Recuerdo en uno de mis viajes buscando zapatos que llegué, en una capital europea, a una calle que era famosa y conocida por su ambiente relacionado con el calzado, allí vi por primera vez esos altos tacones de aguja que iluminaban escaparates de comercios, me causó una impresión sorprendente que de forma imaginaria trasporté a mi ciudad.
Para completar esa propuesta se incentivaría a comercios de Elda para que se ubicasen en las inmediaciones de esa calle e instalase sus tiendas o sucursales, esas tiendas podrían incluso gozar de algunas ventajas o subvenciones municipales en los primeros años de implantación (IBI, Impuestos o tasas de apertura etc.). El propio municipio realizaría una guía con la referencia a las calles y lugares en los que se ofreciesen zapatos de calidad y expresamente a las instaladas en la calle EL ZAPATO.  La iluminación de esos altos tacones de aguja darán un clima de percepción y aceptación de lo que Elda ofrece. Completaría la oferta unos folletos elaborados con diseño y gusto para explicar el porqué de esta iniciativa.
3.- Promover un Taller Artesano para la Confección de Zapatos a Mano dirigido por un monitor profesional (eso ya se hizo en el Museo del Calzado y tubo una espectacular acogida) y con zapateros jóvenes, que harían demostraciones diarias de montaje del zapato. Este taller en principio no se autogestionaria económicamente, de ahí que deba ser el Ayuntamiento quien realice esa inversión y mantenimiento, más adelante con el producto del trabajo podría autofinanciarse. Pero lo importante es que contribuiría a nuestra expresión más genuina y personal. "Elda ofrece en su ruta turística un recorrido por la historia del calzado". El turismo visitaría esa calle y tendría la oportunidad de adquirir zapatos a buen precio a la vez que admiraría las técnicas manuales de confección, añadiendo un valor más a nuestro zapato de calidad.
4.- Convenir entre el Ayuntamiento y empresas de calzado de nuestro tejido industrial, una visita guiada a fábricas en producción para que los visitantes a Elda pudiesen apreciar los procesos de fabricación in situ. Dentro de ese circuito turístico habilitar uno o dos días para visitar fábricas en horario de trabajo. Esto no es único, en otros lugares de Europa y donde el que esto escribe ha tenido la oportunidad de verlo y asistir a ese tipo de visitas en grupo. Para ello bastaría con firmar un convenio de colaboración y marcar, dentro de cada empresa adscrita, una ruta o circuito para que el público pudiese recorrer sus diferentes secciones. Naturalmente sería optativo para las empresas comprometidas, posibilitando que el visitante accediera a las tiendas de venta de las propias fábricas.
5.- Impulsar desde Elda publicaciones que hagan referencia al calzado en general y específicamente al de calidad para mujer. En este pueblo supimos poner en un alto podio una serie de revistas y publicaciones sobre la moda en el calzado, también sobre tecnología zapatera. Lo hicimos de forma pionera y muy por encima de cualquier otra ciudad dedicada a la fabricación de calzado. Esto debe retomarse. Las presentaciones de tendencias deben venir avaladas por documentos elaborados por los mejores diseñadores de nuestro entorno. Lo que hacemos debemos transmitirlo a todo el mundo. También nuestra cultura zapatera. Pero ¿quién debe asumir la responsabilidad de estructurar estas tareas?. De nuevo debemos poner el acento en nuestro Ayuntamiento, es él y sólo él el que tiene el poder de convocatoria ante todos para exigir, si fuera el caso, poner los medios para hacerlos realidad.  
6.-  Impulsar con todos los medios a nuestro alcance una ruta turística que complete ese circuito: Visitas a Elda desde las zonas costeras; recorrido por la Calle del Zapato, calle Dahellos y Plaza del Zapatero con visita al Taller Artesano Municipal; visita a fábricas en producción; visitas al Museo del Calzadodegustación de comidas típicas eldenses. También como es lógico tiempo para visitar otros tesoros de la ciudad: Museo ArqueológicoMuseo Etnológico; Kurhapies; Miguel`o y el de hormas de Isidro Aguado, es decir,  visita a la ciudad en su conjunto, Plaza Mayor etc..
7.- Es de gran importancia llegar a conocer la capacidad productiva de la ciudad de Elda, es decir, con el actual censo industrial debemos conocer la cantidad de zapatos que Elda podría fabricar en su conjunto, sumando a los industriales que venden sus productos de forma directa a otros que lo hacen a través de comercializadoras. Proponemos por lo tanto una Gerencia de Calzado cuya principal misión sea la de promocionar el calzado eldense, realizando los contactos necesarios entre las empresas y los mercados existentes, tratando sencillamente de vender e introducir nuestros fabricados en todos los mercados. Un gabinete cuya labor se contemplaría también en un protocolo de actuación.
Si nos empleamos a fondo esto puede dar resultados sorprendentes para Elda su comercio y servicios, muy necesarios para esta ciudad y siempre en beneficio del buen nombre como población zapatera.
Hemos sido testigos en el año que ha acabado de que algunas reivindicaciones que hemos solicitado insistentemente para nuestro pueblo: el Instituto de Formación Profesional del Calzado como referente nacional o la Escuela Nacional de Diseño Industrial de Calzado, se han marchado a otra población con presupuestos millonarios, sin piedad hacia nuestra ciudad que llevaba años reivindicando estos logros.
Estamos siendo testigos de cómo se nos cierran las puertas de la Administración Autonómica en cuestiones referentes al calzado, sin un plan que nos ayude a la necesaria Diversificación Industrial. Nada podemos esperar que nos sea a través de nosotros mismos. También vimos promesas incumplidas de ayuda al Museo del Calzado por "impedimentos legales" que no eran otros que pedir se hiciese un gasto sin tener fondos para ello, y nadie salió en nuestra ayuda.
Si sirve de referencia y para que los responsables de aquellas adjudicaciones no lo olviden, Elda, a través de su Escuela de Enseñanza Secundaria de La Torreta, pionera en España de las enseñanzas de Formación Profesional en calzado, en los años 1993 a 1995 intervino en el diseño de los Contenidos Curriculares de los Grados de Formación Profesional de la Piel: Confección, Calzado y Marroquinería para las enseñanzas profesionales en España. Durante tres años, participé como experto docente e intervine en la adecuación de esas enseñanzas a la formación profesional de la rama piel. En los años 1995 y 1996 se recogieron en dos libros los contenidos de los trabajos realizados: Confección ISBN 9788489167339 y Calzado y Marroquinería ISBN 9788489167445. En aquellos años el Instituto de Elda era el referente nacional de la formación profesional de calzado.  También intervine en nombre de la Formación Profesional de Calzado en un Congreso Internacional de Formación Profesional celebrado en Zaragoza en 2003, con una ponencia sobre las enseñanzas de calzado en España. Sin embargo en el último año 2019 hemos sido testigos de la humillación sufrida al adjudicar esa referencia nacional a otro centro mucho más joven en su implantación pero  probablemente con mejores padrinos.
De igual forma Elda, desde los años 70 viene demandando una Escuela de Diseño, con constantes alusiones y llamadas desde la Asociación Nacional de Modelistas y Diseñadores de España AMEC, para ser también un referente nacional en esta materia e impartir desde Elda las enseñanzas de diseño ya que en esta ciudad se concentraba el mayor número de diseñadores y desde Elda se lanzaban las diferentes tendencias de calzado cada temporada. Pero esta reiterada petición para nuestra ciudad también se ha adjudicado a otra población zapatera con un presupuesto millonario, y lo más desolador es que el conformismo haya atenazado lo que debiera haber sido una inmediata protesta.
¿A que estamos esperando para poner en marcha ideas novedosas? ¿Qué más nos puede pasar?. ¿Nuestros méritos como profesionales no son valorados?
¿Porqué nadie defiende las ideas que día tras día se ponen sobre la mesa? ¿Porqué ningún partido político, asume lo que es un hecho tangible de indudable gravedad?.
Elda se merece lo mejor y no podemos cerrar los ojos a la realidad ni seguir confiando en nada que no sea nuestro tesón y esfuerzo.
Apelamos a los jóvenes  con ánimo positivo y sin mirar el origen de las ideas, lo importante es que sean útiles y fructifiquen. Mi larga experiencia profesional y mis muchos años vividos al servicio del sector zapatero me avalan y me permiten una solvencia moral para afirmar sin reservas que a poco que se asienten esas ideas, Elda resurgirá en 2020 y este será su año.
J.M.A.